Foto Reseña # LA REINA DE LAS NIEVES de H. C. ANDERSEN

La reina de las nieves// H. C. Andersen
Ilustraciones de Óscar T. Pérez

Snedronningen

Gerda y Kay son muy amigos, se quieren como hermanos. Son vecinos y les encanta jugar juntos. Un día de invierno, mientras los copos de nieve forman figuras al caer sobre el cristal de la ventana, la abuela de Kay les habla de la reina de las nieves, hermosa y blanca.
Esa misma noche, mientras Kay observa cómo cae la nieve, un copo grande se posa en la ventana, transformándose en la reina de las nieves. Desde ese momento Kay no vuelve a ser el mismo, hasta que un día desaparece en un trineo conducido por la propia reina. Será entonces cuando Gerda comience a buscarlo, incansable, pero no será tan fácil hallarlo.

Cuenta la historia que un día un trol creó un espejo donde todo lo bueno desaparecía y sólo quedaba maldad y el demonio no podría estar más feliz le enseñaba a todos su magnífica creación, todo el mundo que se veía reflejado en el espejo, este les devolvía una mueca. Y el trol quiso burlarse de los ángeles y voló hasta el cielo, con la mala suerte de que el espejo se les escapó de las manos y se hizo añicos en la tierra creando aún muchos más males, porque esos pequeños cristales se usaron para ventanas, y para gafas, algunos más pequeños se metieron en los ojos y corazones de las personas y otros... aún siguen volando por el aire.

Voy a empezar está reseña hablando de la edición, porque empezarla de otra manera sería un sacrilegio. La reina de las nieves no podría tener una edición más bonita y más cuidada. Enamora desde la portada y las ilustraciones por dentro, como ya habéis podido ver, son maravillosas.

"- Mi trineo, no te olvides de mi trineo!
Fue de lo primero que se acordó, y lo ataron a una de las gallinas blancas, que regresó volando con el trineo a la espalda. La reina de las nieves besó otra vez a Kay, que ya había olvidado a la pequeña Gerda, y a la abuela, y a todos los de casa.
- Ya no habrá más besos -dijo ella-, porque te podría matar a besos."

Nunca había leído este clásico, y hacerlo de la mano de esta preciosa edición no ha podido ser más perfecto, y ahora que ha caído en mis manos, se lo contaré a mi niña al menos una vez al año, porque tengo la impresión de que La reina de las nieves es un poco como "El principito" que con cada lectura vas aprendiendo cosas nuevas, y que según el momento en que lo leas, tendrás una sensación u otra... ojalá hubiese tenido la oportunidad de leerlo de pequeña.

" - ¿Vive con una princesa? - preguntó Gerda.
- ¡Pues sí! - dijo el cuervo-. Pero me resulta muy difícil hablar tu idioma. Si entiendes la lengua de los cuervos, te lo puedo contar mejor.
- No, no la he estudiado - dijo Gerda, pero su abuela sí que sabía aquel idioma, y también la lengua P. ¡Ojalá la hubiera estudiado ella también!
- No importa -dijo el cuervo-, te lo contaré lo mejor que sepa, pero no será muy bien."

Leer La reina de las nieves ha sido como volver a ver el mundo de otra manera, con esa pizca de magia, que caracteriza a las cuentos, donde los cuervos hablan, las rosas te cuentas historias y los espejos están malditos. Nos podemos encontrar con una historia llevada de la manera más inocente, a través de los niños, donde se nos demuestra que en el nombre de la amistad y del amor estaríamos dispuestos a cualquier cosa.

La reina de las nieves es un cuento que se lee en nada, y cuando lo acabas dan ganas de volver a leerlo y perderte entre las ilustraciones.

¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido?

¿Os apetece leerlo?